Lorenzo Navarrete, decano del Colegio, asistió al desayuno informativo en el que Albert Rivera habló de los ejes de su propuesta para España

Albert Rivera, presidente de Ciudadanos, fue el protagonista el pasado martes 22 de enero de un desayuno informativo del Fórum Europa. Fue presentado por Begoña Villacís, portavoz del Grupo Municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Madrid, quien aseguró que la formación naranja es el «partido del centro» y que Rivera está llamado a ser «un hombre de Estado». Lorenzo Navarrete, decano del Colegio, fue uno de los invitados al encuentro en representación de los politólogos y sociólogos madrileños.

Rivera, en su intervención, trató de realizar una instantánea del «momento de transformación» o «cambio de era» que se vive actualmente. Explicó que, hasta 2013, en la política española, se daba un bipartidismo y que ahora nos encontramos ante una situación «en la que las viejas formaciones sólo suman un 45%». Según sus palabras, estamos en un instante en el que ya no hay mayorías absolutas. Por eso, los políticos han de llegar a acuerdos. «Hay más gente moderada y razonable que en los extremos», remarcó.

Habló del país en el que le gustaría vivir: «En uno donde los valientes ganen, donde los que quieren dialogar estén en las urnas por delante de los que quieren dividir». Desea un país donde las tecnologías formen parte de su ADN. Criticó el que no llegue a pactos de Estado. «No hay pacto educativo porque Pedro Sánchez [presidente del Gobierno] lo dinamitó. No hay pacto por la Justicia porque quieren poner y quitar personas», declaró Rivera. «En el Congreso, en vez de decretazos, deberíamos hacer leyes para 30 años», matizó. A renglón seguido, se comprometió a unir puentes y a que los Gobiernos sean constitucionalistas.

A su juicio, el gran reto de un líder político no es buscar las diferencias. «No voy a buscar diferencias ni voy a perder un segundo en mirar al pasado. Pido que los moderados nos unamos, ante la descomposición del bipartidismo», aseveró. Expuso que hay que escoger entre dos caminos, el de la división o el de la unión. Una ventaja que mencionó de Ciudadanos es que ha nacido en este siglo. La otra que citó es que está «en el centro del tablero».»Yo creo en esta España que les estoy contando, en esa España del futuro. Cada vez que abrimos las urnas, hay un proyecto político que crece que es Ciudadanos. Déjenme creer que hay gente que quiere que sigamos creyendo, que esto llegue a La Moncloa», pronunció. Sus ejes para transformar la economía de España son «la educación y la formación, el empleo y la innovación». Subrayó que «el milagro económico español es básicamente consolidar una clase media potente».

Añadió que no conoce ningún país próspero del mundo que no tenga empresas. Defendió, en ese sentido, que un país próspero tiene que tener un ecosistema donde crezcan empresas. «Si los empresarios crecen y crean empleo, el país gana. Eso es la cadena de la economía positiva en la que creemos, para que la gente invierta en España y se quede aquí», alegó. Con seguridad jurídica, moderación fiscal, desde el Gobierno. Pero también con modernización. Futuro en vez de pasado. Es uno de los ingredientes de Rivera.

Una de las preguntas que lanzaron los asistentes fue que si existe posibilidad de que Ciudadanos apoye los Presupuestos Generales del Estado presentados por Sánchez. Lo negó rotundamente porque en su partido creen que la legislatura está agotada y porque, «según la autoridad fiscal, son un fraude». Pidió en varias ocasiones a Sánchez que convoque elecciones generales.